1993: el año de mi violación

sentía mucho dolor, pero supo muy bien cómo no herirme profundamente, mi hermanita lloraba porque yo estaba llorando y me dijo con una voz profundamente tenebrosa "sí sigues llorando la mato", tuve que ser fuerte y comencé a caminar a donde este ser me llevaba.
[ ] Nos metió por un camino de tierra, rodeada de maleza y plantas que te arañan la piel, él iba caminando detrás de mí cuando sentí un empujón me caí y en el suelo me dio varias patadas, mientras mi hermana a mi lado tirada en la tierra lloraba desconsolada. Me hizo pasar a un terreno y atravesar una cerca que tenía alambres de púas, me haló el cabello, rompió mi ropa y me violó, mientras tenía su navaja en mi cuello y mi hermanita veía, ella aún era una bebé y no recuerda nada de ese día.
[ ] Yo tuve que ser fuerte, por mi y por ella, no lloré, no grité, no supliqué, recordé lo que me enseñó el sensei, en el momento que lo vi más vulnerable, jadeando y gozando le lancé arena en los ojos, en mi mano derecha tenía una piedra que había agarrado mientras me pateaba en el suelo, con esa piedra le pegué en un ojo, cuando soltó su navaja se la clavé en la mano, me levanté me subí el pantalón y lo pateé tantas veces como pude en la cara, tomé a mi hermana con las pocas fuerzas que me quedaban y corrí mientras me dolía el cuerpo, me dolía el Alma.
[ ] Nunca podré olvidar ese día, su cara, su voz, tampoco olvidaré que nadie me ayudó, ni le avisó a mi mamá que me buscaba llorando, llegué caminando a mi casa mientras lloraba le dije a mi madre "un hombre me violó" ya sabía lo que era la violación porque leía mucho desde los 4 años, leía todos los periódicos que habían en mi casa y preguntaba el significado de las palabras, pero ningún concepto explicaba el dolor que sentía en ese momento, mi cuerpo maltratado, el miedo que recorría mi interior y ver a mi mamá llorando sintiéndose culpable por no haber visto a ese monstruo. Ese día murió una niña y nací yo. Mi hermana nunca tuvo ese recuerdo en su mente y ese siempre es mi confort.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

¡Yo no me quería ir, ellos me obligaron! Breve historia de una migración forzada.

Francis